miércoles, 5 de noviembre de 2014

LOS MITOS DE CTHULHU: EL UNIVERSO DE LOVECRAFT

Cthulhu, de Michael Komarck

«Que no está muerto lo que yace eternamente, y con los eones extraños incluso la muerte puede morir».
(Cita extraída del Necronomicón)

Los Mitos de Cthulhu son un conjunto de narraciones de “horror cósmico” fruto del esfuerzo colectivo del llamado “Círculo de Lovecraft”, al que pertenecieron autores como Derleth, Schorer, Clark Aston Smith, Bloch, o Frank Belknap Long, entre otros. Todos ellos contribuyeron a crear un universo de libros malditos, mundos paralelos y seres monstruosos capaces de sembrar el caos y el espanto en las calles de la mítica ciudad de Arkham y en las mentes de cuantos lectores se atrevan a traspasar sus portales de conexión.

El panteón lovecraftiano resultante estaría formado, por lo tanto, por tres grandes categorías de seres: los monstruos de las Tierras Altas del Sueño (Ángeles Descarnados, Vampiros, Dholes, Gugs, Shantaks…); los monstruos del mundo vigil (los Profundos, los Mi-Go, Shoggoths y demás híbridos) y los dioses [divididos en Arquetípicos y Primordiales o Primigenios, subdividiéndose estos últimos en Mayores (como Hastur, Ithaqua, Yog-Sothot, Azathot, Nyarlathotep y Cthulhu) y Menores(Yig, Dagón, Nug, Hydra…)]. Veamos cuál es su historia:

En un pasado muy muy remoto, la Tierra fue creada por los Dioses Arquetípicos (encarnación del Bien), quienes forjaron también a sus habitantes: La Gran Raza de Yith (que vivía de parasitar cuerpos ajenos) y Los Dioses Primigenios (encarnación del Mal). Pero todos ellos se rebelaron contra sus dioses creadores: los primeros desistieron pronto, y huyeron a través del tiempo hasta el siglo CC, donde ocuparán los cuerpos de una raza de escarabajos que sustituirá a la Humanidad; los segundos continuaron con su rebelión, hasta que fueron vencidos por los Arquetípicos, [quienes crean el Sello (el símbolo arcano: una estrella de cinco puntas que los domina al igual que la cruz cristiana domina a los vampiros)], siendo encadenados o desterrados en algún lugar del Cosmos:

Ithaqua, por Patrick McEvoy
- Hastur, el Innombrable, el Rey Amarillo,  fue exiliado al lago de Hali, en las Híadas, cerca de Aldebarán; 

- IthaquaEl Que Camina en el Viento, a los helados desiertos árticos; 

- Yog-Sothot, un ser omnisciente que otorga el conocimiento a cambio de un sacrificio humano y una servidumbre eterna, fue lanzado al Caos junto con Azathot, el líder de la rebelión, una masa colosal, caótica e informe, al que en castigo, le privaron la cordura; por ello, su sola visión provocaría la locura.

- Nyarlathotep, el Caos Reptante, el de las Mil Caras (pues puede adoptar cualquier apariencia, como la del Faraón Negro egipcio), es el único que escapó del castigo y está libre, entre nosotros, conspirando para acabar con la Humanidad. Es el más cruel de todos, pues no se contenta con la destrucción, sino que le complace sembrar el terror y provocar la locura.

- Cthulhu, el más importante de todos estos seres míticos, a la ciudad de Rlyeh, en las profundidades del Pacífico. Cthulhu es un ente de 10 kms de altura, cabeza de pulpo y cuerpo de dragón recubierto por una gelatina que lo hace indestructible, que aguarda el momento de ser liberado y reclamar entonces lo que un día fue suyo. Es una verdadera deidad que tiene su legión de seguidores: la raza de los Profundos y humanos híbridos, que oran esperando “el día en que las estrellas estén en posición” y Cthulu despierte de su letargo y vuelva a la vida.

Pero la hora de la venganza está próxima, y en el Necronomicón, el “libro que contiene las leyes de los muertos”, escrito con sangre y recubierto de piel humana, se contienen las viejas fórmulas olvidadas que permitirán despertar a los Primigenios (como el famoso Noveno Verso que devolverá la libertad a Yog Sothot o la cita con la que encabezamos este artículo). Es un libro maldito cuya lectura provoca la locura y la muerte, y por ello fue destruido por la Iglesia Católica… Pero no todos los ejemplares desaparecieron… Si os atrevéis a adentraros en su magia ritual podéis buscarlo entre las polvorientas estanterías de la Biblioteca de la Universidad de Miskatonic, en la ciudad de Arkham, en Massachussets.